En los últimos tiempos, Paola Jara se ha dedicado a hacer versiones de las canciones que oía de niña y le gustaban. Una de ellas es La llorona, en la que su potente voz remite, de inmediato, a la educación que recibió.
Jara (nacida el 16 de mayo de 1983 en Apartadó, Antioquia, como Paola Andrea Zapata Jaramillo) hace una versión contundente, aunque dice que siempre, siempre, la mejor será la de Chavela Vargas, “una artista genial, con esa voz tan particular, una mujer controversial e interesante”.
La canción es un son tradicional mexicano del istmo de Tehuantepec (entre Oaxaca y Veracruz), y aunque su autoría es atribuida por algunos conocedores del folclor de ese país al poeta Andrés Henestrosa, muchos versados afirman que es parte de la tradición local y que sus coplas se han ido recogiendo por los caminos.
Un buen número de artistas han interpretado La llorona, pero Paola Jara también se luce. Los siete semestres de música clásica que estudió en la Universidad Eafit, de Medellín, están en esa versión del clásico mexicano.
“Yo era la oveja negra de la facultad –cuenta riéndose– y la única estudiante que los fines de semana cantaba rancheras y música popular para poder pagar los semestres”. Una de sus profesoras le insistió mucho que dejara los sonidos populares. “Me hablaba de darme su apoyo para irme a Europa, a perfeccionar mis estudios, pero no me veía allí. Admiro y respeto mucho la música clásica, y le agradezco a ella su cariño, pero no era lo mío”.
Hoy es una de las más cantantes más importantes del género popular y es parte del concierto del 28 de noviembre, ‘El gran desquite’, en el que estará con Jhon Álex Castaño, Kari Castillo y Janfer, y la DJ Marcela Reyes, en el Teatrino de los Andes, de Bogotá, en formato presencial y virtual. Y Salud por él, Como si nada, Mala mujer, Mi mayor venganza, No la beses y Prohibido son sus canciones más conocidas.
Jara canta profesionalmente desde los 14 años. Con Álvaro Taborda, de Tares Club, al que perteneció, grabó su primer disco. Ha pisado escenarios tan importantes como el del Mono Núñez, en Ginebra, Valle. Y le abrió un concierto a Juan Gabriel.
En el 2009 lanzó su primer disco, llamado Paola Jara. Lo grabó con Daniel Calderón y de ahí salió su éxito Voy a olvidarte. “Por el hecho de ser mujer, siempre he sentido que nos ha tocado luchar más, dejar en el camino sueños y sobrepasar sentimientos. Pero, poco a poco, eso ha ido cambiando y, bueno, lo que no nos mata nos hace más fuertes, y es un aliciente para no dejar de andar. Esa resistencia nos va volviendo más consagradas y más valientes”, dijo en una entrevista en este diario hace algún tiempo, cuando, con dos de sus colegas, Francy y Arelys Henao, dio un concierto dedicado a las mujeres, para empoderarlas.